Nos escribe Carmen planteándose la reforma de parte de su casa: salón, comedor y cocina con lavadero. Sus problemas parecen ser dos:
- por un lado el salón, comedor y cocina están separados, por lo que no se optimizan los espacios. No hay comunicación directa entre salón y cocina, debiendo cruzar siempre el comedor. En definitiva, se desaprovecha el espacio.
- Por otro lado, la cocina es demasiado larga y estrecha, creando un efecto de pasillo que se acentúa por la estrechez del paso, reducido a 85cm, menos que un pasillo convencional.